No temo al viento que remueve los anhelos
ni al sol que ilumina las esquinas del deseo
tampoco tengo miedo al paso de los años
ni quiero más de lo que tengo
Soy la incógnita de un momento obtuso
entre dos que conocí desconociendo
el brote de años de roces y desencuentros
el milagro del discurrir de un río nuevo
No temo al sueño que no tiene final
ni tan siquiera temo a los silencios
tampoco tengo miedo a no mirarme
ni quiero ver más de lo que veo
Soy el confluir de muchos hechos
el resultado final de las venganzas
el origen de un verbo y mil palabras
la vía apia después de una batalla
Y así te quiero
Con todas mis carencias
con todos mis pecados
envuelta en sedas y damascos
cubierta con todos mis harapos
Y, contigo de la mano, no existe el miedo
ni al sol que ilumina las esquinas del deseo
tampoco tengo miedo al paso de los años
ni quiero más de lo que tengo
Soy la incógnita de un momento obtuso
entre dos que conocí desconociendo
el brote de años de roces y desencuentros
el milagro del discurrir de un río nuevo
No temo al sueño que no tiene final
ni tan siquiera temo a los silencios
tampoco tengo miedo a no mirarme
ni quiero ver más de lo que veo
Soy el confluir de muchos hechos
el resultado final de las venganzas
el origen de un verbo y mil palabras
la vía apia después de una batalla
Y así te quiero
Con todas mis carencias
con todos mis pecados
envuelta en sedas y damascos
cubierta con todos mis harapos
Y, contigo de la mano, no existe el miedo
© Moony
1 comentario:
Hola vieja amiga, ¡tanto tiempo! me alegro de leerte de una vez más.
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