9.4.11

Historias


Anoche quise abrir el bies de un cigarrillo
para encontrarle tantas sin razones que me fumo
y sólo me teñí los dedos de amarillo, de amarillo
sin final y sin principio


Llovía en la maceta del salón y no entendía
el ploc ploc de las gotas en la alfombra
hasta que se hizo un charco tan profundo
que al meter la mano, rocé el tiempo
que jugaba al dominó y perdía con los días


Fue jueves una vez y recuerdo que domingo otra
porque sonaron campanas y olía a sábanas usadas
pero no me desperté a la hora y se marchó
como se habían ido yendo las maneras
tras las olas de una taza de café


Por eso me quedé esperando sin moverme
hasta que llegara la hora de una muerte

Sin saber a ciencia cierta la de quien


(A un tiempo muy lejano)
© Moony


7 comentarios:

Ramón María dijo...

Inquietante a la vez que angustioso.

Beso

Sherezade dijo...

Es triste, niña, aunque eso no significa que no sea bello, como todo lo que escribes. Y si te "fumas" sin razones no sólo los dedos los tendrás amarillo, si no el admita, que es lo peor.
Mil estrellas de luz blanca que te den mucha fuerza y alegría
Sherezade

Аmanecer dijo...

Que triste poema, pero lleno de verdad, Creo que serìa mejor esperarla en movimiento.
( uff que me ha provocado escalofrìo.)

Tu si que eres maravillosa!!!
Gracias por tus muestras de cariño siempre...
Y la imagen.

Besos enormes y mis muchos màs.

Ligia dijo...

Muy bellos tus versos. Abrazos

alkerme dijo...

Me pareció como un sueño extraño...

Un beso, Moony

A. Elisa Lattke Valencia dijo...

Así se hacen algunas noches cuando es sólo el cielo raso el que imaginamos estrellado, un cigarrillo es como una estrella lejana que se apaga con el sueño y, las gotas en la alfombra acaso sena las lágrimas que no vemos desprenderse de unos ojos. <la vida es sólo un puñado de ideas con patas y cerebro, siempre camino de un lugar llamado: Nosesabedóndeycuándoyparaqué...

Un saludo amigo. Elisa

Lucía dijo...

..."sin saber a ciencia cierta la de quien"

Me ha recorrido un escalofrío, Moony.

Guardemos aquel tiempo en una cajita y que el mar del olvido la arrastre lejos.

Un beso muy grande.