Me desperté una mañana
llevando el cielo por dentro
siendo mis ojos dos lunas
reflejo del sol entero
En mi cabello, la noche
apaciguaba las aguas
haciendo la sal silencio
por las rendijas de un beso
En el espejo, palomas
en el armario, jilgueros
y en el corazón, tu nombre
bordándome días nuevos
Sobre la piel, arena de playa negras
entre sábanas, tu aliento
y, yo, hecha pleamar
recogidita en tu puerto
13 comentarios:
Todo el poema es para enmarcar y guardar pero:
En el espejo, palomas
en el armario, jilgueros
y en el corazón, tu nombre
bordándome días nuevos.
Jo eso es muy bonito!!
Un abrazo.
Cuando te leo y voy a comentar se me ocurren figuras llenas de palabras. Como el tema es tu poema las voy podando, zass, zass, tijeretazos como un jardinero, como un peluquero. Para no disturbarlo, para dejarlo ahí, brillando. Tu poema. mi aplauso.
La poesía la escucho en Mi menor, ese sonido de la palabra que empuja desde adentro y llega al estómago. Uf, la belleza de cada verso va llenando el pentagrama. Qué peazo de compositora.
Besisimos
Ah, me encanta el post que has hecho en Caja de Caricias. 😀
Muchisimas gracias Agapxis, siempre con la sensibilidad brotando de ti.
Un beso.
Pedro, no te Cortes, tú escribe lo.que quieras.
Gracias.
Beso de día frío.
Luz...en mi menor, que maravilla...ojalá fuera compositora.
Besisimos.
Gracias Luz, creo que no lo ha leído nadie jajajaja.
Monny...
Myu belo o teu poema!
Haverá sempre um colo doce onde o teu barco se acolha...
Besos para ti.
Muchisimas gracias A.S
Besos.
Jajaja, me imagino (comentarios cerrados 😀), pero es un tema que interesa a muchos y por supuesto leerán.
No creo jajajaja
Sobre la piel brama la caricia.
Besos.
Publicar un comentario