30.11.19

Tristeza


Y se me vino diciembre
calada hasta los huesos

Trota la lluvia en mi alma
y en este pueblo pequeño
me abandono a los recuerdos

Ya no me quedan ni fuerzas
para levantar la cara
se me han caído los brazos
y camino sin andar

La vida es una desgracia
llena de fantasías
con dos momentos reales
el nacimiento y la muerte
porque el resto nunca existe
sólo te lo imaginas

Al mirar por la ventana 
veo desolación 
pintada entera de verde
que no puedo compartir 
porque ya nadie me quiere

Hoy enterré al que me cantaba
blanco como la nieve 
tan pequeño que cabía
en el hueco de mi mano

Y así va pasando mi vida
en la soledad completa

© Moony

1 comentario:

Miguel Schweiz dijo...

Una poesía inmensa, que deja de serlo para convertirse en sentimiento puro junto a tu Ibáñez
Besitos